jueves, 10 de abril de 2008

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Bueno, ya llevo más de nueve meses acá y pude ver más o menos en que se parecen nuestras costumbres a las de los españoles y en que no. Muchas veces pensé y tambien escuché "Italia, España, Argentina, no hay tantas diferencias"; y es verdad que las diferencias entre las constumbres argentinas y las españolas son muchas menos que las de un argentino con un ruso, por ejemplo.
Pero comparando costumbres me surgieron diferencias que antes de venir nunca me hubiera imaginado; así que me puse a pensar en las cinco cosas materiales que creo que un argentino común más extrañaría de Argentina viviendo es España. Algunas son obvias, otras creo que inimaginables:

Puesto 5: Kioscos

Acá en España NO EXISTEN los kioscos, no existe; así, a secas. Si querés cigarrillos o pilas vas a la tabaquería; si querés helados, chocolates o snacks vas al supermercado; si querés una lata de gaseosa fría vas al supermercado, la compras caliente, la ponés en la heladera de tu casa y despues de un rato la tenés fría, también la podes pagar 4 o 5 euros en un bar. Bares debe haber uno por cuadra, pero kioscos ni uno. Pequeña cosa, no indispensable pero cuando no está se siente.

Puesto 4: Los horarios de supermercados/almacenes/bares
Se nota demasiado que acá el trabajo no falta y casi nadie sacrifica un Domingo, un feriado o unas horas a la noche para tener abierto su negocio. Los supermercados casi casi que hacen horario de oficina; si yo el Sabado no voy al super estoy frito. Lo unico que te salva son los pakistaníes que acá son como los supermercados chinos de allá peeeeero en lugar de ser baratos son caros. Otra alternativa es una cadena de supermercados que tienen abierto hasta las dos de la mañana pero comprar algo ahí te sale un ojo de la cara. Con los bares pasa algo parecido, a las 2 o 3 de la mañana cierran todos (esto es en Cataluña, no en toda España), no queda ni uno abierto. Menos mal que no estoy en mis épocas de estudio, me acuerdo cuando le caía a las 3 de la mañana al del "pool Libertador" y siempre alguna minuta salía. Eso acá no se puede.

Puesto 3: Galletitas de agua
Esta si que me trae mal..., las góndolas de los supermercados están llenas de mermeladas y quesos espectaculares. El problema es que acá las galletitas tipo Express o Traviata no existen, entonces si querés algo de eso tenés que ponerle pan y la verdad que no es lo mismo, además el pan hay que comprarlo todos los días porque se pone duro, las galletitas de agua no. Una vez conseguí unas Traviatas, las pagué €1,2 el paquete y encima se ve que con el viaje transatlántico se humedecieron un poco.

Puesto 2: Asado
Creo que no hace falta explicar demasiado.

Puesto 1: esta es una bomba
No todo es comida en la vida. Para mantener el equilibrio del universo todo lo que entra tiene que salir y acá viene el problema. Resulta que un baño hogareño estándar está compuesto por lavatorio, inodoro, ducha y... nada más! Eso es todo lo que tiene un baño estándar. No se donde haría promesas Charly, es que acá el bidet es casi casi un lujo. En casa por suerte tenemos uno pero cuando salgo de casa, en algún viaje, realmente lo extraño. Por ejemplo, desde que estoy en Europa tuve la posibilidad de dormir en dos hoteles 4 estrellas; uno en Dublin (ya voy a postear sobre ese viaje) y otro en Andorra, en ninguno de los dos había bidet, 4 estrellas y sin bidet! Realmente no se bien de donde viene la costumbre, dicen que de los italianos. Es algo que me sorprendió y que a la hora de buscar piso para vivir me trajo sus problemas porque no siempre hay. Igual hay que ser un poco conformista y pensar que siempre se puede estar peor; por ejemplo, una vez lo acompañé a Marcelo a comprar algunas cosas a un almacén pakistaní, el pobre estuvo como media hora tratando de explicarle al paki que era el papel higiénico, el paki no entendía nada, no sabía que era, no sabía de que hablaba y como jamás vendió papel higiénico, en su lugar le ofrecía papel de cocina convencidísimo de que era eso lo que Marcelo buscaba, quedará para la imaginación de cada uno pensar como solucionan en oriente el problema, si es que lo solucionan o peor aun, si es que para ellos es un problema.

ACLARACIÓN: todo el mundo se preguntará ¿y el mate? ¿y el dulce de leche? Resulta que yo no tomo mucho mate (aunque en un rato me voy a la playa y para bajar la galletitas siempre me viene bien), de todas maneras acá se consigue facil, un poco caro pero se consigue yerba, mate, bombilla, termo...; creo que con la pava se complica pero no es un desafío lograr tomar mate, con el dulce de leche pasa y me pasa lo mismo (aunque las facturas con dulce de leche si se extrañan). Tambien pasa algo parecido con el fernet, lo más barato que conseguí fue €9,95 la botella, incluso en algunos bares te lo preparan. Estas tres cosas son las que a priori uno cree que no va a encontrar acá pero no es así, la invasión argentina está en marcha hace rato.